VII Meditaciones y pensamientos sobre El Rosario

VII Meditaciones y pensamientos sobre El Rosario

11 abril, 2013 | Reflexiones sobre la Virgen

Comparte:

Acabamos el mes de Octubre

El mes de El Rosario

A lo largo de todo este mes: oraciones, pensamientos y meditaciones de santos y cristianos, nos han ido acompañando para reforzar en nosotros el amor a Nuestra Madre y renacer en nuestro corazón el deseo amoroso de honrarla con la oración que tanto le gusta y agrada y que es fuente de tantas Gracias: El Rosario.

A un dia de celebrar el dia de nuestros queridos difuntos , El Rosario se nos muestra con todo su explendor y como fuente de vida y de intercesión para todos los seres queridos que todavía necesiten de nuestra oración para llegar al Padre Dios.

Hoy traemos a nuestra web los pensamientos y oraciones de todos los que nos leeis en esta humilde web y que muestra la realidad de nuestras vidas y de cómo El Rosario nos ayuda en nuestro vivir cristiano. Damos las gracias a todos ellos por compartir, libremente, ese pedazo de su vida y de su intimidad con nuestra Madre Inmaculada.

Joelbi
«Para mi el Rosario es la oracion que me da fuerza y me aserca a Jesucristo me mantiene luchando, cuando pido la proteccion de la Madre por medio del Rosario soy protejido, cuando hablo de Maria delante de alguien que no cree en ella me fortalesco pues ella es la Madre del unico Dios verdadero, Maria santisima como te pagaremos los favores recibido de ti? Soy todo tullo Madre llevame a tu hijo… «

Ivan
“El Rosario cadena de oraciones incesantes y meditación plena de la vida, muerte y resurrección de Nuestro Señor, juntamente con momentos sublimes de la vida de nuestra Madre María. El Rosario lo rezo dos veces al día una de ellas es muy temprano a primera hora de la mañana y otra por la tarde. Llevo rezandolo mucho tiempo y me hace sentir bien, pero no pienso en mi, siempre pienso en que nuestra Madre se sienta feliz, se sienta alegre, resplandezca en Ella una sonrisa, en realidad eso es lo que me importa. Creo que es un arma importante para luchar contra las divergencias existentes en nuestra vida, una fuente llena de esperanza que nos pone a los pies de María. En las peticiones que hago al comenzar el Rosario siempre le pido a nuestra Madre que Ella me guíe a su Hijo Nuestro Señor, que Ella sea mi camino hacia Él, que quiero ir de su mano.”

Fabrizio
“Mi experiencia con el Santo Rosario es de hace dos años y medio, cuando, tristemente mi padre enfermó de aquella enfermedad que, en un periodo de apenas tres meses, le llevó al Cielo, donde estoy seguro que ahora descansa al lado de Nuestro Padre.Hasta entonces, mi relación con el Santo Rosario había sido bastante inconstante, pero cuando mi padre enfermó, empecé a rezarlo dos veces al día y, cuando podía, incluso más. Lo rezaba por la mañana y por la noche pero, también en el coche, aprovechaba momentos para escucharlo por mp3,…Esta maravillosa oración, junto con la Suplica a la Virgen de Rosario de Pompeya, a la que mi padre era profundamente devoto, me ayudó a vivir de una forma diferente su enfermedad. No pedía especiales milagros y quizás he recibido más de lo que realmente pedía: mi padre no tuvo grandes sufrimientos y la fuerza interior que me dio el Santo Rosario para soportar esos difíciles momentos fue increíble. De otra manera no se como hubiera podido pasar por aquello. “

Isael
“El Rosario para mí: El Rosario es estar en conversación amorosa con la Mami, en su presencia tranquilizante y acogedora.
Cuando lo rezo, mi cara empieza a sonreír sin pretenderlo. Un gozo que va aumentando.
El Rosario es para mi una sonrisa sincera multiplicada por 50.
Es el resumen de todas las letanías: María, causa de mi alegría.”

Hemano Javier Guillén

«Tantas cosas y tan verdaderas que se han dicho sobre el Santo Rosario, que cómo decir otra más. Sin embargo, es posible si me preguntan que qué significa para mí, así que humildemente voy a intentar escribirlo.Empecemos por el principio. Es decir, en mi niñez, a pesar de la fama de aburrido que constantemente le quieren colgar al Santo Rosario, pues yo era un niño muy alegre y juguetón que cada vez que rezaba el Santo Rosario nunca tuve el sentimiento de aburrimiento al hacerlo, sino como una especie de sobrecogimiento ante el misterio, es decir, que sentía que allí había algo especial; y con el paso del tiempo descubrí claramente que ese algo especial era Alguien especial, era María, nuestra Madre.De niño, pues, lo rezaba alguna vez en familia, junto con mi madre que desde que lo recuerdo lo reza a diario, y ha sido un gran testimonio para mí; y especialmente lo rezaba durante el mes de Mayo en mi parroquia (Nuestra Señora del Carmen de Chimiche, en Tenerife, una de las islas Canarias), pues aquí también se le dedica ese Mes de las flores a nuestra Madre María, y cómo no, rezar todos los días de ese mes el Santo Rosario es el mejor gesto de cariño que le nace hacer al pueblo sencillo, sencillo y santo como la oración del Rosario. Aunque también somos concientes de que el Mes de Octubre es el Mes del Rosario; de hecho mi hermano mayor nació el Día de nuestra Madre del Rosario, el 7 de Octubre. Y en esos dos entornos, casa familiar y parroquia, también me di cuenta de que no era el lugar lo que marcaba esta oración, sino la relación mística que se produce en ella; es decir, es más con Quien que dónde, pues en ambos lados me encontraba especialmente a gusto y con buenas sensaciones similares.Luego empecé a rezarlo mientras caminaba , hasta que sin ninguna obligación hace años que lo rezo diariamente y con mucha santa Alegría. A día de hoy continúo rezándolo mayoritariamente mientras camino o mientras conduzco de un lugar a otro; y hace años me llevé la grata sorpresa de saber que así mismo nació, como oración itinerante mientras se iba de un lugar a otro.Para mí, el Santo Rosario, es como una oración-relación con nuestra Madre, con Aquella que está tan cerca de Dios y que también está tan cerca nuestro; es también el Rosario para mí como un remanso de Paz en medio del camino diario; como un bendito parón y descanso para mi alma en medio de los ajetreos del día a día. Es también y ha sido como una Fuente de Luz, pues cuántas veces me ha ayudado a decidirme por algo luego de rezar el Rosario, o cuántas veces mientras lo rezaba (y sin pensar en ello) de repente me ha llegado la idea que dio solución a un problema que tenía o la mejor manera de hacer alguna cosa. En momentos de sequedad espiritual, el Rosario también ha sido una gran ayuda para orar cuando no me salían otras palabras; por lo que también lo denominaría como un arma de resistencia para nuestra alma, para nuestra fe. El Rosario para mí es también como un refugio en medio de la tormenta, y creo que esa comparación es muy fiel a la realidad que se produce en mí y en mi alrededor al rezarlo, pues no importa cuan grande sea tu problema o tormenta que te azote, que al rezar el Rosario no quedes más consolado y experimentes esa Protección que viene de lo Alto. En el Rosario, también, experimento la exquisita e inmensurable dulzura y ternura de nuestra Madre María, es como si me acostara en su regazo mientras lo rezo y luego continúo con su Bendición todo el día. En este sentido, vuelvo a ser como un niño, y recuerdo la Palabra de nuestro Señor donde nos dice que hay que ser como niños para entrar en el Reino de los Cielos; y así pues me ayuda el Rosario a vivir el Reino ya aquí en la tierra. Y seguro que muchas cosas más que significa el Santo Rosario para mí, pues María es Madre y nosotros, por infinito Amor de Dios, somos sus hijos.También, últimamente vengo comprobando el instrumento de Bendición tan grande que es el Santo Rosario; saben cómo? Pues al ver cómo justamente el Rosario es el objetivo de tantas críticas y el elemento protagonista de tantas pancartas y eslóganes enemigos de la Fe. Una oración tan sencilla como el Rosario, que no le hace daño a nadie, y sin embargo que suscita rabias tan airadas contra ella. Se ve que sí le hace daño a alguien, al Enemigo de la Fe y Enemigo nuestro, pues si no, no hay explicación de que se revolvieran tanto contra el Rosario. Y tiene que ser así, pues en verdad que el Rosario es una gran Bendición, para cada uno de nosotros y para toda la humanidad.Disculpen si me alargué demasiado, pero es que se deja uno llevar por la Belleza de Dios y de nuestra Madre y eso apasiona mucho. Desde Canarias les agradezco mucho a todos los hermanos de la Milicia de la Inmaculada su Amor por Mamá María, con la esperanza de seguir aprendiendo con ustedes, y si Dios quiere algún día más de cerca también físicamente.Un fuerte y fraternal Abrazo en Jesús y María!! Y Feliz Día de Todos los Santos, Feliz Día de la Belleza de Dios!!»

Miguel Angel
“Soy sincero cuando reconozco lo ardúo que se me hace a veces rezar El Rosario y las mil excusas que pongo en la vorágine del dia a dia para no buscar ese encuentro cariñoso con La Madre que es el rezo de El Rosario; pero hay un momento en que su presencia con esa oración es la más dulce de todas .
Es cuando en un viaje largo y de noche, mis tres hijos y mi mujer tranquilamente se quedan dormidos y entonces en la oscuridad y acompañado sólo por las luces de la carretera y el dulce silencio de mis seres querido, empiezo a desgranar a media voz las 50 Avemarías. En ese momento de encuentro amoroso con La Virgen, siento que es Ella no sólo la que conduce por mí; sino la que conduce mi vida y la vida de mi familia para llevarla a su Hijo.
¡Gracias Madre y perdóname las veces que me olvido de tí!