El Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, el Cardenal Robert Sarah, ha visitado Polonia del 20 al 25 de julio, invitado por los franciscanos conventuales polacos.
El cardenal Sarah inició su viaje en el convento de Niepokalanów -La Ciudad de la Inmaculada, fundada en 1927 por San Maximiliano María Kolbe- en el marco del Centenario de la Milicia de la Inmaculada que se conmemora este año. A su vez, el Purpurado mantuvo un encuentro los días 20 y 21 de julio con la comunidad franciscana.
Asimismo, el cardenal Robert Sarah se reunió en Lasek con los jóvenes mílites, que se están formando en la Escuela de Evangelización de la Inmaculada (SEN). Durante este encuentro, el Purpurado guineano pudo compartir algunas de sus vivencias y el testimonio de su vocación, al tiempo que explicó en qué consiste su función al cargo de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos que preside. En especial, recordó que la liturgia es obra de Dios y sirve para glorificar a Dios y santificar al hombre. En ello resulta de vital importancia el silencio, la concentración y la observancia de las disposiciones establecidas por la Iglesia. Además, el Cardenal apuntó a tres elementos básicos en la vida de cualquier evangelizador, también de los animadores de la Milicia de la Inmaculada: la cruz, la Eucaristía y la Virgen María. El cardenal Robert Sarah se refirió a Niepokalanów como “tierra santa”, invitando a aprovechar bien las gracias que Dios dispensa en este lugar.

Aquí se puede consultar el reportaje fotográfico en Lasek.
El sábado 22 de julio, el Purpurado se desplazó a Cracovia, donde presentó su último libro, La fuerza del silencio, en el convento de los franciscanos conventuales sito en la c/ Franciszkanska.
El domingo 23 de julio el Cardenal Prefecto presidió la Santa Eucaristía, en la que se celebró la concesión del título de Basílica Menor al templo de San Nicolás en la localidad de Rychwald en la Diócesis de Bielsko-Zywiec, en el sur de Polonia. En este Santuario regentado por los franciscanos conventuales, se venera Nuestra Señora de la Tierra de Zywiec.

El cardenal Robert Sarah continuó la “ruta” kolbiana visitando el campo de exterminio nazi de Auschwitz-Oswiecim.
Al regresar a Niepokalanów, en la tarde del martes 25 de julio, en la festividad de Santiago Apóstol, el cardenal Sarah presidió una solemne eucaristía en la basílica de Niepokalanów. Al comienzo de la celebración, el Cardenal reconoció que se sentía muy emocionado teniendo el honor de oficiar la Eucaristía vistiendo una casulla y utilizando un cáliz de San Maximiliano María Kolbe. “San Maximiliano me invita a que pueda seguirle hasta el final de mi vida” – admitió el Cardenal. En la homilía, haciendo alusión a las lecturas, el Prefecto exhortó a los fieles a elegir siempre la humildad y el abajamiento, que son testimonio de la verdadera grandeza. “Para ser los primeros, debemos entrar en la profundidad del misterio del Señor” – aseveró el Cardenal, añadiendo que “la Eucaristía es la contemplación de la acción de Dios… Es el Señor el que nos invita a actuar. Viene y al mismo tiempo nos sana”.

Concelebraron con el Cardenal Sarah el arzobispo de Varsovia-Praga, Mons. Henryk Hoser, así como numerosos padres franciscanos, encabezados por los provinciales de Varsovia y Cracovia, junto con el guardián del convento de Niepokalanów.

Concluida la Santa Misa, en el aparcamiento situado delante de la basílica, el Cardenal bendijo los vehículos particulares y oficiales, incluyendo un camión del servicio de bomberos de Niepokalanów.

Acto seguido, el Prefecto de la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos participó en una reunión abierta, para responder a las preguntas que le fueron formuladas por el público asistente.
Fuentes:
http://niepokalanow.pl/wiadomosci/klasztor-kat/kardynal-sarah-to-jest-ziemia-swieta/